Os recomiendo entrenar el agradecimiento. La idea es que sistemáticamente, cada día, dediquemos unos minutos a pensar en todo aquello por lo que puedo estar agradecido. Pronto descubriréis que con este ejercicio se obtienen resultados positivos desde el primer momento.
Pero para hacer más operativa y práctica mi recomendación voy a experimentarla por escrito y para vosotros, y así os comunico los resultados que yo mismo obtengo.