La enfermedad como oportunidad de sanar el alma

Iniciamos una nueva sección de colaboraciones con Jéssica Rosas de México D.F., que estudió Psicología Educativa, con la especialidad en Problemas de Aprendizaje, en la Universidad de las Américas. A partir de ahí, ocho años trabajando en escuelas con niños con necesidades educativas y especiales, y como terapeuta, en la Sociedad Mexicana de Déficit de Atención e Hiperactividad. Además, funda y coordina el Servicio de Apoyo Educativo en la Escuela Alexander Bain (Mexico) y crea la consultoría on-line La Catarina Tedu– Terapias para niños y adolescentes, donde imparten terapias de aprendizaje y brindan cursos de capacitación a padres de familia y escuelas. Hoy, aquí nos habla de ‘La enfermedad como oportunidad de sanar el alma’…

Dolor y Emociones«Recuerdo que desde pequeña vivía con un miedo latente hacia la enfermedad, y no sabía de dónde provenía aquel temor al escuchar esa palabra. Haciendo memoria, me vienen flashazos de cuando era bebé, en una imagen llevaba gorro y chamarra en un día soleado. También recuerdo que cada vez que llovía y me mojaba me daban fuertes gripes y mis anginas se inflamaban. O la vez que confundieron una apendicitis con una fuerte colitis nerviosa.

Desde la pubertad caí en cuenta de que el dolor formaba parte de mí como algo normal e ineludible. Casi todos los días tenía algún malestar y mi temor se fue acrecentando hasta el grado de creer que en cualquier momento iba a morir. En este momento, se reaviva la imagen de una enciclopedia de enfermedades que pertenecía a mi padre y me veo buscando cada uno de mis síntomas, los cuales encajaban perfectamente a enfermedades terminales o atípicas. Aunque no lo crean, desde los 10 años vivía en un infierno de pensamientos catastróficos y fatalistas, pensamientos que se exacerbaron con la edad y un alto nivel de ansiedad.

Y así fui creciendo y sobreviviendo con doctores que me decían que no tenía nada y que lo que pasaba es que era estrés “puro”. Aún recuerdo que si tenía mucha sed inmediatamente acudía a hacerme un estudio de glucosa. Algunos de ustedes me dirán: “Eras una hipocondríaca” en toda la extensión de la palabra”. Y sí, me mostraba como tal, justificaba mis enfermedades argumentando que eran consecuencia de la herencia genética y de la mala suerte. Pensaba que mi destino era sufrir, experimentar mucho dolor y que lo único que podía hacer era acostumbrarme.

cabezaTuvieron que pasar muchos años para que yo despertara de un sueño profundo de falsas creencias, pensamientos negativos y actitudes victimizantes aprendidas desde mi niñez al escuchar y observar a mis padres y familares. Entonces, puse manos a la obra, me enfoqué en descubrir la razón y el origen de cada una de mis enfermedades.

Me hice consciente de que vivía en una profunda inseguridad frente a la pérdida de control de las situaciones. Así que asistí a terapia y me dediqué a leer bibliografía sobre metafísica, las enfermedades y su origen emocional.
Cuando descubres el origen de las enfermedades, el primer paso es aceptar la enfermedad como una oportunidad de sanar tus emociones, la segunda, hacerte responsable de tus emociones y pensamientos sin culpabilizar a otros. se trata de victimizarte y compadecerte, sino de hacerte cargo y preguntarte ¿Qué hago con esto que siento? ¿Qué tengo que aprender de esto? ¿Cómo cambio esto que me está pasando?

Las enfermedades son causa de emociones mal administradas, pensamientos negativos y un gran maltrato hacia nosotros mismos. Se vale caerse y levantarse, en cada una de estas acciones, hay un proceso de autosanación. El estado de nuestro cuerpo es el reflejo de nuestro estado emocional, es por ello, que te sugiero que hagas caso a tus dolencias ya que estos son parte de tus bloqueos emocionales.

Citando a Louise Bourbeau: “Todo malestar dice que te ames”, “Al amarnos dejamos que sea nuestro corazón quien dirija nuestra vida, no nuestro ego”.
“Sanar es darte el derecho de ser humano, con tus miedos, tus creencias, tus límites, tus fuerzas, tus debilidades, tus defectos, tus deseos y tus anhelos, darte el derecho de aceptarte tal como eres ahora, sin reproches y sin culpas”

Jéssica Rosas Cristiani
Psicóloga Educativa
Terapeuta de Reiki
México, DF.

[Imágenes extraídas de Creative Commons Images]

2 comentarios en «La enfermedad como oportunidad de sanar el alma»

  1. Muy buen artículo. Creo que tomaste la mejor decisión de tu vida. Si no te amas a ti misma es difícil vivir plenamente y salir adelante. Supiste tomar las riendas de tu vida y resolver tus problemas emocionales apoyandote en una terapia profesional. Eso demuestra que no siempre nos es posible detectar y solucionar nuestros miedos y conflictos internos por nosotros mismos Felicidades !!

Los comentarios están cerrados.